Stephen Hawking ofrece 1000 millones de dólares a quien muera por él

Como sabemos la ciencia ha sido de buena ayuda para la medicina, ya que en los últimos años ha avanzado de manera insospechada en materias de trasplantes y lo vemos reflejado en las operaciones como injertos de cara en 2005, brazos en 2008 y piernas en 2011.

Ante ello nos preguntamos y el ¿trasplante de cerebro? acaso podrá ser esto posible. Siendo un tema muy delicado podría llegar a ser una realidad por el físico teórico y divulgador científico británico Stephen Hawking.

Al parecer el famoso científico no quiere morir y ofreció 1000 millones de dólares a algún donante que previo debería pasar unos estándares de salud como tipo de sangre, ADN, enfermedades, condición física, etc.

En sí el proceso correcto de aquello sería realmente el 'trasplante del cuerpo'. Así como lo lees, por ende se necesita superar antes varios impedimentos médicos existentes en la actualidad.

Lo cierto de todo es que hasta el momento, la cirugía no ha logrado aún separar con éxito el cerebro de la médula espinal. Pues forzosamente hacerlo causaría la muerte del paciente.

MIRA: LOS TRASPLANTES DE CABEZA YA SON POSIBLES (VIDEO)

Asimismo, una de las reglas de oro para llevar a cabo un trasplante importante es que haya muerte cerebral, si no sucede esto no se puede cambiar este órgano de cuerpo como muestra el video.

Sin embargo, si no llegáramos a tener en cuenta este detalle, cabe mencionar que en 1970 el doctor Robert J. White logró en Cleveland el primer trasplante de cabeza de un mono a otro.

Durante la intervención consiguió que el animal tuviera consciencia y viviera por 9 días. La clave de tal suceso fue que el mono no podía moverse, ya que su cabeza no estaba totalmente unida al cuerpo.

Sin duda el experimento no fue completo, pero fue útil para demostrar que en un futuro esta técnica sea posible desarrollarla en humanos.

DATO: La primera operación de este tipo, cuyo coste asciende aproximadamente a 11 millones de colares, podría hacerse en el año 2017, según declaró el cirujano italiano Sergio Canavero en febrero de este año.